• Título: Dos mundos, un Dios
  • Autor: Andrea Llano León
  • Localización: Casa de Andrea, Madrid, España

Esta imagen refleja, en su actualidad, las nacionalidades ecuatoriana y española de Andrea, pero también encierra la conexión de su padre, que sigue en Ecuador, y de su madre, que vive en España. En ella se sintetiza, tanto físicamente como emocionalmente, lo que significa pertenecer a dos países.

 «Puede parecer solo un trozo de papel, pero en el [pasaporte] está el peso de una distancia impuesta por tierra y mar que me separa de mis seres queridos. Es la bienvenida a una nueva vida, pero también un adiós a lo conocido, a lo familiar».

 El elemento religioso que aparece en la fotografía está profundamente vinculado a la relación que Andrea mantiene con su familia. Cada llamada de su padre o de su madre, para darle bendiciones o preguntarle cómo está, es un acto de cuidado y presencia, aunque separados por la distancia. La fe es una parte fundamental de su identidad y su cultura, una manera de mantener viva esa conexión emocional a pesar de la lejanía. El yute trenzado, hecho de cuero de soga, tiene un significado especial para ella: representa sus raíces, su tierra y su sentido de pertenencia. Aunque siente un fuerte vínculo con Ecuador, su país natal, también ha hecho de Galicia su segunda patria durante los últimos diecisiete años, un lugar al que guarda un profundo cariño y que extraña ahora que vive en Madrid.